domingo, 15 de abril de 2012

Guatemaltecos y su pintura

Carlos Valenti       

   
Carlos M. Valenti Perrillat, de escasos cinco o seis años de edad, se distinguió como una criatura sumamente paciente, de frágil salud y carácter suave. Era el preferido de la madre, con la que le uniera lazos de profundo amor, por el desbordado afecto que ella le profesaba. 


                   Carlos Merida
Danza y teatro
Carlos M. Valenti Perrillat, de escasos cinco o seis años de edad, se distinguió como una criatura sumamente paciente, de frágil salud y carácter suave. Era el preferido de la madre, con la que le uniera lazos de profundo amor, por el desbordado afecto que ella le profesaba. 
Elma Rojas
las utopias de Elmar Rojas
La pintura de Elmar Rojas es, si se quiere, utópica.  Logra poseer, sin embargo, aquello que Leonardo da Vinci afirmaba imposible para el hombre: El sueño. Así la pintura de Rojas es comparable a la imagen de los espejos. Un antiguo azogue rojizo parece interponerse entre la imagen y el espectador y en ese espejo, una catarsis, una elusiva imagen del yo multiplicado y dividido secuencialmente se expande en el lienzo, como si se tratara de las repercusiones del eco, o de ondas magnéticas, concéntricas que nos refieren, que nos atraen y nos repelen una y otra vez, desde y hacia el punto de partida. 


No hay comentarios:

Publicar un comentario